Musique escrita

18.9.11

Sentarse a llorar.
Llorar en la micro.
Taparse la boca cuando lloras por las noches.
Llorar boca abajo en la almohada.
Mirarse al espejo y llorar.
Escribir mientras lloras.


Escoja su forma. Esas son las más odiadas por mi, pero las que siempre uso.

3.9.11

Sí, me equivoqué quizás. Te dejé de lado, siempre preferí a otro. Quizá te dije que te amaba cuando no lo hacía. No lo sé.
Ahora ya no estás como quisiera, aunque en realidad nunca lo estuviste. Siempre yo. Siempre yo en tus conversaciones, siempre escuchándote, aconsejándote, consolándote. mirándote, dejando mis cosas de lado por atender a las tuyas. Siempre fue así, no sé si lo notaste alguna vez. No sé si notas que esto apesta, que odio saludarte "como si todo estuviera bien". Es incómodo. Duele. Y sí, es verdad, no suelo contar mis cosas. Parece que prefiero arreglar los problemas de los demás y los mío, bueno, yo me las veré... Desde que nací, comencé a luchar. Supuestamente no nacería viva, pero aquí estoy.
No sé qué pasó en el camino. Nunca me dijiste nada. Y podría asumir errores que hoy no veo, pero no sé qué ocurre. Es todo tan raro. He llorado por ti, por lo que no ha sido esto. Guardo tantos momentos buenos y vuelvo a la pregunta de siempre... ¿Qué pasó?

A veces veo tus ojos negros, que brillan y no creo en nada. A veces cuando pasa esto, pienso que lo que ocurrió antes no fue de verdad. A veces creo que es rabia y cobardía. A veces lloro cuando escribo, a veces quiero retroceder el tiempo y otras gritarte en la cara, pidiéndote una explicación de porqué me dejaste ir.